
Mi perro se ha aburrido de su pienso
Tu perro no se cansa de comer siempre lo mismo
Solemos atribuir a los perros percepciones y pensamientos humanos, bastante más complejos de los que puede llegar a construir el cerebro canino.
Como os imaginaréis, no todas las especies tienen el cerebro igual de desarrollado, lo que no quiere decir que unas sean más o mejores que otras.
Hablemos del tiempo. Ayer, hoy, mañana, hace un rato... los perros no son conscientes del espacio temporal.
Sí lo son, en cambio, de las rutinas, las cuales les ayuda a establecer ese reloj imaginario, para saber cuándo toca comer, cuándo jugar y cuándo toca descansar.
Por lo tanto, no saben que comieron "x" pienso a las 8 de la mañana; pero sí que, por la mañana, después del paseo, les toca desayunar.
No es que no se acuerden de que comieron o que no se acuerden del alimento en sí, pues al ver y oler un alimento concreto, saben si ya lo han comido y si les gusta o no. Simplemente, no tienen la percepción de cuándo fue la última vez que lo comieron.

Si a todas estas explicaciones le sumamos que el cambio de alimentación provoca alteraciones en el aparato digestivo de los perros, podemos llegar a una conclusión.
Efectivamente, es mejor que coman siempre lo mismo, porque no se van a acordar de lo que comieron ayer, si así evitamos problemas de salud y malestar en nuestros compañeros peludos.
En definitiva, lo más importante es encontrar una dieta, ya sea pienso o comida natural, de pollo, de cordero o de pescado, que le siente bien a tu perrete y que sea buena para su salud.
Y no, mucha comida no es sinónimo de quererles más. Ni darles dulces significa quererles mejor.
Todo lo contrario, si quieres querer bien y mucho a tu peludo, asegúrate de que come alimentos aptos para su cuerpecito y, sobre todo, de que se mantenga en un peso saludable.
Y si por algún motivo tienes que cambiar su alimentación...
Recuerda que siempre debe haber un periodo de transición entre un tipo de alimento y otro, ya sea el paso de un pienso a otro o de un pienso a dieta barf, etc.
Esta transición se hará quitando paulatinamente el alimento antiguo, que se irá mezclando con cada vez más alimento nuevo.
Generalmente, las cantidades a mezclar vienen determinadas por los propios fabricantes, al igual que la duración de este periodo de cambio entre un alimento y otro, aunque esto último te lo marcará, sobre todo, tu perro.
Pon especial atención a la forma, consistencia y color de sus cacas y a los vómitos, si los tiene. Una caca blanda o con mucosidad puede indicarnos que estamos yendo demasiado rápido.